miércoles, 13 de agosto de 2014

Ladrones con chalecos policiales ingresaron a una vivienda maniataron a la familia y los desvalijaron

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12 agosto, 2014

En la madrugada de hoy cuatros personas con chalecos de policía y armados ingresaron a la fuerza a una vivienda de Brown al 1600. Maniataron a sus propietarios y se llevaron una cifra de dinero no determinada, varios objetos y un auto Ford Kinetic 2014.

El hecho ocurrió aproximadamente a las tres en la vivienda propiedad de la familia Venech en Brown 1666. En el lugar se encontraban José y Susana (la pareja propietaria de la vivienda) y Florencia, hija de ambos.

Susana dijo por FM DaLe! Venado Tuerto 91.1: “sentimos golpes muy fuertes seguido de roturas de vidrios en la puerta que da al patio y nos encontramos con personas vestidas de policía que nos gritaban que nos tiremos al piso porque venían a hacer un allanamiento. Por eso mi hija rápidamente desconectó la alarma”.

Por supuesto, luego, los intrusos aclararon que eran ladrones y reclamaron dinero, aunque “siempre manifestaron que no les querían hacer daños”.

Por otra parte, la mujer relató a los periodistas de la emisora: “Le dimos el dinero que teníamos a mano pero querían más y nos amenazaron diciendo que se iban a llevar a mi hija sino hacíamos lo que pedían. Les insistimos que no teníamos más y nos taparon con una sábana y se llevaron todo lo que encontraron”. Entre otras cosas, se alzaron con televisores, una Play Station, un GPS, celulares, una cámara de foto, celulares , joyas y el auto que había en la propiedad. Sobre este último Susana contó: “Nos preguntaron si tenía rastreo satelital y les dijimos que no, así que se lo llevaron”.

Además agregó que cortaron todos los cables de los teléfonos inalámbricos y se llevaron la caja madre de las cámaras de seguridad y el cpu donde quedan registradas las imágenes.

De todos modos, la víctima indicó que los delincuentes se presentaron como profesionales y que en todo momento insistían que no les iban a hacer daños. De hecho los maniataron con precintos pero se tomaron el trabajo de dejar a Florencia con la atadura más floja para que luego pudiera liberar a los demás integrantes de la familia. “A mi hija no le salía un anillo que se querían llevar y entonces le dijeron que no se lo quite así no se lastimaba”.

Finalmente, Susana sostuvo que los ladrones poseían algún dato equivocado, ya que días atrás habían realizado una operación inmobiliaria (habían adquirido una quinta). “Nos quedamos sin nada, así que llegaron tarde”, concluyó.


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